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sábado, 12 de febrero de 2011

Jill hasta que deje de existir

Podria haber dicho que nunca la ame
pero ya eso, es cosa del pasado.
que sus ojos eran azules y no
color café,
eso de que habria importado,
Si ya no la tengo a mi lado.

Mientras en el infierno frio de los mismos
juegan perdidos los intintos de la muerte
buscando con quien entretener su tiempo,
enloquese este instante para quererme
para llenarme de su ser misero
lamentando no ser yo mismo
como quien sin paracaidas
se arroja ante el abismo.

Y ya no puedo un instante mas resistir
dejar de quererle mientras se pierde
en esa constante lucha de insentimentalismo
que busca besar en sus labios la muerte
amada solo por su propio irealismo,
el cual solo hace fingir
no sentirse hasta dejar de existir...

Por que no soy lo que en si quiso ver
por que no es lo que en mi deje de ser
recuerdos vagos de galacias sin sonrisas
sin gratos recuerdos que me den las gracias
a todos los momentos benevolos que deje
clavados en cada uno de sus huesos
a los mismos que reclamo
que me devuelvan esos versos
en los limites en que estoy desolado
solo por estar a su lado
mientras le grito al vacio que me la devuelva:
con sus angustias, con sus palabras bellas
con su dulzura y amargas tristesas
para no olvidarme mientras me olvide ella
de que la existencia es cobarde
mientras no se tiene con quien tenerla
...y asumiendo que estos pasos son del destino
mutilo mis pies para no darlos
mas alla de lo que siempre quise;
ni mas aca de mis recuerdos permitirme
pararme frente al mar a llorarla
como quien se desangra sin sangre
o como quien muriendo en si solo puede salvarse
del frio dolor que el olvido permite a la tristesa
esta que no sucumbe a mi espanto
y que mi oscuridad llena con su quebranto,
hasta no ver el limite de su rostro
por que eso eres tu,
lo que no soy yo en este vacio
la nada queriendo recuperar lo perdido.

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